Estoy fuera...
Llené noches en las que no salían estrellas, escribí pa' cuatro gatos y pa' cuatro perras, escribí en lares tales como hostales, lonjas, locales, AVEs, pensiones feas, y hasta en la calle escribiendo en la acera. Dejé por el camino amigos y otras tantas parejas como enemigos sintiendo que así me alejaba. Dejaba mi piel en hojas, mi alma en letras, mi mente en otras palabras pa' romper techos y metas. Entre frases y entradas intenté tocar la fibra, y casi rozo el fondo por rabietas y envidias de cuatro tontos con sus prontos, y críticas destructivas, fui el blanquito de su punto de mira, pero ya no, porque para mí, esto acaba aquí...
Fui a regalar sonrisas y provoqué mil enfados, quise transmitir, sí, pero me trataron a palos.
Fui el sinónimo de falso, de malo y ávaro, mediocre, así me llamaron, pero ya no, pero ya no, pero ya no...
Con ésto no quiero decir que voy a dejar de escribir, sólo que me he dado cuenta de muchas cosas y ya no siento como lo hacía cuando me abrí la cuenta o cuando empecé a escribir el blog, por lo tanto, será como una nueva etapa, una nueva etapa en la que voy a intentar luchar por mis sueños y por lo que quiero, y seguir firme con mis ideales. No sé si el cambio se notará por aquí o no, pero espero que yo sí lo note, y no sé cómo, pero voy a luchar por lo que quiero. Nunca dejaré de hacer lo que me gusta y quiero por cuatro subnormales que me digan "tú no vales" y tú, sí tú, deberías hacer lo mismo, nunca dejes de luchar por lo que quieres. Que no importe el tiempo envertido, el dolor sufrido o el esfuerzo empleado, y recuerda, ningún camino de flores lleva a la gloria.
Gracias a todos los que seguís aquí desde el principio y gracias a los que llegaréis.
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